martes, diciembre 15, 2009

Adelgazar comiendo más - Respuesta a Etna

Referente a lo publicado en La palabra al vuelo.

Considero una retórica bastante burda el pretender fomentar el transporte público a través de la creación de más vialidades exclusivas para transporte privado. Es como querer bajar de peso comiendo más.

Creo que el principal problema tiene tintes matemáticos, aspiracionales e ideológicos. Explico. Matemáticos porque en este asunto se ve la influencia de un factor importante de nuestra cultura que afecta, directa o indirectamente, todos los ámbitos de nuestra vida: la gestión. Recordemos que toda licitación conlleva un beneficio económico para quien brinde los "servicios" de gestión, el cual pagan los entes privados a los funcionarios públicos por la asignación de las obras. Y se cobra en porcentajes -es vox populi que con el PAN la tarifa subió a 15 por ciento del total asignado-, por lo tanto, una obra de miles de millones le dejaría una ganancia nada despreciable en tiempos preelectorales a Marcelo y su equipo. Y es aquí donde entra la parte aspiracional, porque está muy claro que Ebrard quiere ser presidente de México y, si tiene dinero que lo respalde para hacer una campaña intensa, sin duda será el candidato del PRD.

Dejando de lado toda la marrullería política de México entero, quizá el problema más relevante es el ideológico. La movilidad de la capital del país sólo se solucionará cuando el 30 por ciento de la gente se mueva en bicicleta, y para ello se requiere una verdadera red de vialidades exclusivas para este medio de transporte. De nada sirve tener una de las ciclopistas más extensas del mundo si ésta corre por una sola avenida.

Para lograr lo anterior -y que me disculpen los dependientes y amantes del carro- se requiere forzosamente tomar un carril en decenas de calles para que los ciclistas se trasladen con seguridad.

Incluso voy un poco más allá, porque sin duda nuestros políticos tienen la mirada muy corta, creen que lo que vemos es lo único que hay. ¿Por qué no pensar en un medio de transporte distinto a lo que conocemos, que sea seguro, cómodo, nada contaminante, individual, más barato que el automóvil y que te lleve a donde quieras? Quizá se lee imposible de lograr, pero ya existe, se llama Personal Rapid Transit (PRT) y se ha venido desarrollando desde hace cuarenta años.

En Abu Dhabi, por ejemplo, están construyendo Masdar, una ciudad con cero emisiones contaminantes que contempla la desaparición del automóvil como medio de transporte interno y, como sustituto, está en marcha el desarrollo de un sistema elevado de PRT que abarcará todas las calles de la ciudad para la movilidad de la gente y las mercancías, dejando así el espacio público a nivel de piso libre para peatones, ciclistas y áreas verdes.

Mientras nosotros discutimos cómo quedarnos atorados en el pasado, el mundo que está invirtiendo en ciencia y tecnología le da forma al futuro. Así funciona en México. Las ideas ilógicas son nuestras ideas, queremos adelgazar comiendo más.



Foto tomada de ULTra. Prototipo de PRT que está siendo construido en el aeropuerto de Heathrow, en Londres.

viernes, diciembre 04, 2009

Hacer lo justo

A todos nos han dicho más de una vez: “tienes que hacer lo justo”. Las personas pasan años aprendiendo a descifrar esa oración. Muchos nunca lo consiguen.

Quienes sí lo lograron, y con bastante claridad, fueron los dirigentes del Bank of America (BofA). Hace más de un año se les cayó la sonrisa con la crisis financiera mundial generada por Wall Street. Al poco tiempo se intercambiaron los personajes y ellos, acostumbrados a prestar dinero, pidieron ayuda al gobierno de Estados Unidos, el cual, generoso, le dio más de 40 mil millones de dólares al BofA para asegurar que el banco más grande de EU siguiera funcionando.

En México sabemos bien de qué se tratan estos rescates bancarios: el Fobaproa (hoy IPAB) sigue siendo una costosa lección. Pero hay una diferencia sustancial entre el Fobaproa gringo y el mexicano: los directivos del BofA, ya con la sonrisa otra vez puesta en el cuerpo, van a regresar la totalidad de ese préstamo sacado de los impuestos de los estadounidenses y, además, como saben su negocio lo van a pagar con intereses, justo como los bancos le exigen a la gente que lo haga cuando ellos prestan. 45 mil millones de dólares será lo que regresen a los estadounidenses. Y las acciones justas traen beneficios, sólo con anunciar que van a pagar su deuda las acciones del BofA crecieron seis por ciento.

De 1995 a la fecha, se han destinado cerca de 700 mil millones de pesos para "salvar" a los bancos mexicanos, unos 55 mil millones de dólares que seguimos pagando, pero la principal diferencia está en que los préstamos del gobierno mexicano para rescatar a los bancos del país se convirtieron en deuda pública en 1998 -bajo el gobierno de Ernesto Zedillo- y lo que el gobierno de EU prestó para el rescate de sus bancos fue eso y no más, un préstamo. Los estadounidenses gozarán de sus recursos íntegros traducidos en servicios y obra pública… nosotros los mexicanos nos comemos entera la deuda que se generó para mantener en el mapa bancos que después fueron vendidos.

Hace ya mucho tiempo que los banqueros operando en México duermen con los músculos relajados, sus instituciones tienen ganancias millonarias cada mes, pero aun así no han siquiera sugerido que algún día nos pagarán el favor que les hicimos los mexicanos. Al contrario, escatiman el crédito y nos exprimen tanto como pueden. Que alguien vaya otra vez, que alguien les repita a los banqueros mexicanos esa premisa elemental de la vida: tienes que hacer lo justo.



No puedo esperar...
a que Citigroup -dueño de Banamex- anuncie también que le pagará al gobierno de EU lo que le prestó.

Foto de Joshua Lott/Reuters publicada en MinnPost. Un empleado de Lehman Brothers -empresa que detonó la crisis financiera mundial- saliendo de su oficina en Nueva York el 15 de septiembre de 2008.